La adaptación de La Rebelión de Atlas, la novela de Ayn Rand escrita en 1957 (y que llevo a la mitad, lo digo como quien no quiere la cosa) dejo de ser una película. Dada la amplitud de la novela original , entre 1.000 y 1.200 páginas según ediciones, es muy posible que acabe convirtiéndose en una serie de televisión, para la que ha sonado sólo un nombre, el de Charlize Theron, la cual sin embargo todavía no está convencida de poder interpretar el papel protagonista.
Pero antes de adelantar acontecimientos: La Rebelión de Atlas es la historia –entre otras muchas– de la joven empresaria Dagny Taggart, encargada de operaciones de una compañía de ferrocarril en una especie de Estados Unidos alternativo donde parecen combinarse unas cuantas características de finales del XIX, la Gran Depresión y los Años 50.
Al tiempo que logra reimpulsar su deteriorada empresa a través de la aplicación de un revolucionario metal, Taggart descubre que varios de sus colegas están desapareciendo sin dejar rastro mientras un individuo misterioso llamado John Galt emerge como nuevo líder social. El libro es mucho más que una novela: es uno de los pilares básicos de la filosofía del Objetivismo –ideada por la propia Rand– en la que se defiende que el único sentido del ser humano es la felicidad personal a través del racionalismo y de un sistema que ofrezca plenas garantías a los derechos individuales.
Total, que iba a ser película y la iba a interpretar Angelina Jolie. No more.
Según el blog Risky Business, de Variety, la intención de los productores del film, Howard y Karen Baldwin, es reconvertir el film original –protagonizado por Jolie, dirigido por Vadim (Casa de Arena y Niebla) Perelman, en una miniserie que inaugurará el canal por cable Epix, a cuenta de MGM y Viacom/Paramount. Theron ya mantuvo contactos con los Baldwin. Si bien se ha confirmado que Jolie ya no está implicada en el proyecto, la presencia de Theron sigue siendo “incierta”, según el blog.
Cabe destacar que, antes de la implicación de Jolie y Perelman, el productor Albert S. Ruddy (El Padrino) ya intentó llevar a cabo este proyecto en 1972, momento en el que la propia Rand seguía con vida, y que terminó abandonando por diferencias creativas con la autora.
Fuente: LHP
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