
Sacha Baron Cohen volverá a caracterizarse en su próxima película para dar vida a un personaje irrisorio que le permita mofarse del estilo de vida estadounidense. Es decir, tal como ya lo hizo en Borat y Brüno. Su siguiente propuesta, The Dictator, presentará la historia que divide la vida de un pastor de cabras y un dictador extranjero depuesto que se pierde en los las tierras del Tío Sam, nuevamente bajo la dirección de Larry Charles, responsable de las anteriores películas y el documental Religulous.
 Cohen en esta nueva película por primera vez no interpretará a un personaje salido de la factoría de su serie de televisión, The Ali G Show,  en un escenario en donde volverá a hincar el diente en la sátira  socio-política, con un personaje con ribetes de Gadafi que es exiliado  de su país en donde las mujeres tienen “poderes delanteros superiores”,   llegando a la tierra prometida para viajar con sus camellos y acostarse  con Megan Fox. El sueño del pibe, claro que en un formato de filmación  que desde ya se anticipa mucho más tradicional y no en modo documental  falso como las apuestas previas.
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