Buenos Aires, 20 de diciembre de 2011
Estimados Productores:El año 2011 fue un año con numerosos problemas de recaudación para el INCAA. Con esfuerzo y trabajo logramos llegar a un final feliz.Queremos agradecer la paciencia, la comprensión y el acompañamiento recibido por parte del sector en momentos de mucha dificultad.Aguardamos con mucho optimismo el año 2012, que sin duda será un año muy positivo para todos.Saludamos a Ustedes con mi consideración mas distinguida.
Liliana Mazure - Presidenta INCAARaul A. Segui - Gerente de Administración
El Instituto de Cine y Artes Audiovisuales Argentino termina un año complicado enviando muy generosamente esta carta a los productores, un buen gesto.
Ahora yo me pregunto ¿No es hora de hacer algunos cambios en la cosa como para dejar de gastar un millón y medio de pesos en películas chicas o medianas? ¿Como puede ser que se estén logrando productos independientes mucho más grandes a un 1% de los presupuestos del INCAA (como en DAEMONIUM por ejemplo)? Tantos se quejan de los subsidios a Aerolineas Argentinas, cuando nuestro cine es subsidiado en casi un 100% y tiene que terminar el año pidiendo disculpas.
Pensando mal y pronto se me ocurren algunos puntos a discutir (habría que sentarse a trabajar en el tema para ser más preciso):
- Eliminar el fílmico de la ecuación. ¡Estamos en 2011! La gente lleva una computadora en su bolsillo mientras viaja en el tren y seguimos dependiendo de una tecnología de más de 100 años. Con la plata que se gasta en ampliaciones a fílmico y copias se podría equipar a muchísimos cines con proyectores de alta definición y ahorrar muchísima plata.
- Eliminar la necesidad de documentos de Libre Deuda para estrenar. ¿No es ridículo estar obligados a seguir estrenando clandestinamente? ¡¡¡El cine es un arte!!! (y más cuando es un arte que da perdidas). Este tipo de restricciones son las que ahuyentan a los inversores privados. Puedo hacer una película con calidad profesional por menos de 100 mil pesos, pero necesito otros 300 mil para que la película sea legal y pueda mostrarse en cines con proyectores de 35 mm.
- Flexibilizar los sueldos del "cine industrial". ¿Por qué estoy obligado a pagar a SADAIC cuando hago yo mismo la música? ¿Como puede ser que se manejen mínimos tan altos, como el caso del guión que roda los 40 mil pesos, por trabajos que pueden realizarse de muchas formas distintas? En las dos películas que realicé de manera industrial hubo que escribir el guión en menos de un mes ¿40 mil pesos por un mes de trabajo? Es entendible en guiones bien desarrollados, pero hay casos y casos.
- Entender el cine no solo como una industria, sino también como un arte. ¿Quien tiene la autoridad para decir que mi guión puede llegar a la pantalla grande o no? Todos los proyectos deberían tener las mismas posibilidades mientras estén realizados con cierta seriedad. ¿Por que estoy obligado a pasar por los sindicatos si no lo siento necesario o no necesito de sus defensas? ¿Como puede ser que sea más fácil hacer una película que lograr "legalizarla"? Entendiendo el cine como un arte cada artista puede aceptar (o no) el sueldo que le ofrezcan, sin obligar al productor a adaptarse a un sistema que no funciona.
El tiempo cambia, el publico cambia, las formas de producir cambian. Nadie le obliga a un pintor a utilizar tal o cual material, pero si nos obligan a los cineastas a adaptarnos a una forma de producir única. Es un tema complejo, imposible de resumir en un posteo del blog, pero que tarde o temprano vamos a tener que empezar a discutir.
Un ejemplo de otra forma de hacer las cosas, 100% independiente de subsidios y que debe haber costado menos de un 1% del promedio de un presupuesto standard del cine nacional:
Más info en :Nuevocinealternativo
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