Juana Sapire, mujer del cineasta argentino Raymundo Gleyzer, declarará como testigo el lunes próximo en los juzgados federales porteños en la causa sobre la desaparición del autor de "Los traidores", ocurrida en Buenos Aires el 27 de mayo de 1976.
Sapire se presentará el lunes 30 de agosto a las 10 en los tribunales de Comodoro Py, en el barrio porteño de Retiro, para testimoniar sobre la desaparición de su esposo, secuestrado por un grupo de tareas en la puerta del Sindicato de la Industria Cinematográfica Argentina (SICA), donde se lo vio por última vez.
Gleyzer pertenecía al "Cine de la base", un grupo de cineastas de comprometida militancia política y preocupados por denunciar y transformar la situación social, que fue contemporáneo del "Grupo Cine Liberación", integrado entre otros por Gerardo Vallejo, Octavio Gettino y Fernando "Pino" Solanas.
En el mediometraje "Me matan si no trabajo y si trabajo me matan", dirigido por Gleyzer en 1974, el cineasta denunciaba con valentía la crítica situación sanitaria de los obreros de la fábrica de baterías Insud, donde se fundía plomo.
La importancia del cine y el ejemplo de Gleyzer fueron registrados por el periodista Fernando Peña y el cineasta Carlos Vallina en el libro "El cine quema. Raymundo Gleyzer", una ardua investigación sobre la obra y la figura del realizador desaparecido durante la última dictadura militar.
"Los traidores", su obra más importante, "constituye -según Peña- uno de los casos extremos en materia de censura política: muerte para su realizador, destierro para buena parte de los actores y técnicos involucrados, desgracia para quienes no pudieron irse del país, silencio y consecuente olvido para todo el conjunto".
La película fue realizada en la clandestinidad entre los años 1972 y 1973, y configura un buen ejemplo del cine militante muy en boga en aquella época, cuya idea inicial era hacer un documental que hablara de la corrupción de la burocracia sindical argentina, pero luego se transformó en una ficción.
Llegada la dictadura militar, Gleyzer, quien estaba fuera del país, resolvió retornar teniendo en cuenta el riesgo que ello suponía para alguien que hizo un filme como "Los traidores" y había firmado por lo menos tres comunicados del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP).
Como era previsible, un comando parapolicial lo secuestró el 27 de mayo de 1976, requisó su departamento y se llevó las cosas de valor económico, pero curiosamente dejó intactas las latas con todas las películas y las carpetas con información sobre las mismas.Fuente: Yahoo
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