En el estudió del león rugidor, que a estas alturas ya apunta a gato famélico, existe una duda esencial: ¿Es la única alternativa de los adeudados llevar a la compañía a la bancarrota?. De acuerdo a Nikki Finke, “los propietarios de bonos de deuda dijeron a MGM, en esencia, que van a dejar que el estudio se vaya a la quiebra para obtener su dinero ya que serán los primeros en la línea en recibir los dineros“. Todo debido a que MGM ha trabajado en una crisis constante, lo que la ha llevado a operar actualmente con una carga de deuda e intereses de pago agendados, por cerca de 4 mil millones de dólares, que instala las dudas en torno a su solvencia y el futuro de sus proyectos en torno a James Bond y El Hobbit.
La situación, luego de fracasos de taquillas contínuos, ha llevado a la compañía a poner en producción proyectos que son parte de su libreria, como Red Dawn, y que podría garantizar el ingreso de dinero rápido. Pero más importante, entre sus propiedades se encuentran las películas de James Bond y son los responsables de co-financiar y distribuir fuera de las fronteras de Estados Unidos a The Hobbit. Esta situación podría poner en pausa la producción de la Tierra Media, a la espera que los derechos sean vendidos, probablemente, a Warner Bros. Y 007 sigue en pre-producción de su siguiente entrega.
Pero antes de cualquier tipo de especulación, MGM querría que los dueños de bonos detengan sus pagos de interés hasta Febrero de 2010, con el objetivo que dichos pagos puedan financiar películas y estas mantengan a la compañía para pagar las deudas. De otro modo, argumentan, la quiebra garantizaría ventas por menos dinero lo que llevaría a pagos que no solventarian todo lo que se les adeuda.
Fuente: SDM
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