Seguro que a estas alturas tod@s conoceran a esta niña tan linda. Se llama Coraline y su nombre da título a la última proeza de Henry Selick, el mago del stop-motion que quiere conseguir que volvamos a quedarnos tan boquiabiertos como con El extraño mundo de Jack, rodada también con esta meticulosa técnica. En ambas películas se utilizaron elementos reales animados fotograma a fotograma, sumándose a esto la dificultad de que todo (o casi todo) esté hecho a mano para la ocasión. Esto incluye el vestuario de la propia Coraline, cuyo pullover podran reproducir a escala “humana” gracias al patrón que ha tenido a bien facilitar la web oficial de la película.
El que lleva la protagonista es real, mide unos 7,5 cm aproximadamente y lo tejio Althea Crome, una auténtica virtuosa en el peculiar arte del ganchillo en miniatura. No sé ustedes pero yo no puedo evitar pensar aquello de “que lindo” y estoy barajando seriamente la posibilidad de pedirle a alguien que me de clases aceleradas de ganchillo (al menos a tamaño natural) para aprovechar el regalito del patrón.
Recuerden que Coraline llegará en breve. Mientras tanto a tejer se ha dicho, ¡que se viene el frío!
Fuente: Extracine
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