Harry Potter y las Reliquias de la Muerte parte I no se estrenará en 3D

En un comunicado dado a conocer por The Hollywood Reporter, lo improbable finalmente ha sucedido. Warner Bros decidió dejar de lado el 3D para que Harry Potter y las Reliquias de la Muerte Parte I solamente sea estrenada en salas tradicionales e IMAX, de cara a su estreno el próximo 18 de noviembre. La situación se debe a que el estudio no tendrá una versión completa para la ventana del estreno de la película, esgrimiendo que “pese a los mejores esfuerzos de todos, no pudimos convertir la película en su totalidad para conseguir los estándares más altos de calidad. No queremos decepcionar a los fans que han esperado por tanto tiempo la conclusión de esta jornada extraordinaria”.

La situación sorprenderá a todos, aunque los más optimistas bien pueden aducir que esta finalmente es una lección aprendida tras los criticados resultados con la tecnología a partir de Clash of the Titans, también del mismo estudio. Aunque también no es un misterio que su franquicia más rentable requiere de una estrategia en donde no pueden simplemente llegar y meter la mano al bolsillo de sus fans. Al menos no de forma tan descarada en lo que se refiere a las criticadas conversiones.

Claro que esto no implica que la segunda parte del final de la saga no llegará con el formato de la tecnología de los lentes, pero, en lo que concierne a la actual entrega, el director David Yates aclara que “esta decisión, que nosotros apoyamos completamente, se basa en el hecho que Warner Bros. siempre ha puesto la calidad primero”. Bueno, repito, al menos de una u otra forma la lección de Clash of the Titans tiene una consecuencia. Por mucho a que el olfato apunte a que esta decisión se debe más en mayor parte a que no lograsen convertir completamente la película y no precisamente a la supuesta alta calidad técnica del proceso no obtenida.

Es demasiado dinero en juego, como para dejar de lado al 3D y su impulso en la recaudación de las películas. Al menos, no por algo tan “minúsculo” como la calidad de la conversión de las películas no filmadas con la tecnología. Y es que a la larga, esa es la principal lección aprendida por los estudios con Clash of the Titans.

Fuente: SDM