‘Bienvenido a Crystal Lake’. Cualquiera se fia de la hospitalidad que destila este póster de ‘Friday the 13th’, con semejante escenario y tamaño psicópata de nombre Jason.
Como tampoco me fio de la fidelidad de esta película de Marcus Nispel con aquella ochentosa de Sean S. Cunningham que inició la saga y que dejó en mí el eterno trauma de tener que estar sentado en el centro de un bote por si acaso sale alguien del mar y se me avalanza.
No dudo del intento de contentar a los fans de la franquicia y darles algo diferente después de … ¿cuántas secuelas han sido?. Perdí la cuenta a propósito. En principio las semejanzas argumentales con la original son evidentes: después de la supuesta muerte de su único hijo en un campamento de verano, una madre empieza a matar a los empleados de campamento. Después de ser asesinada a las manos de los empleados, su hijo, llamado Jason (Derek Mears) regresa para continuar su trabajo ensangrentado. Aca tienen la sinopsis completa.
Chicos/as guapos/as con cara de fiambres en el reparto, casi desconocidos para que esa matanza asegurada en las manos de un asesino misterioso que se esconde en las profundidades de un oscuro bosque en las orillas de un lago remoto y extraño no sea lo menos dolorosa posible. Parece que novedad no hay ninguna pero miedo sí porque esta nueva presentación trailística es salvaje a tope.
A pesar de mi desconfianza puede que sea un espectador curioso. Jason regresa el 13 de febrero de 2009 en USA, ¿será el que yo conocía?.
Fuente: TBDC
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