La vida de Bon Scott, escocés de nacimiento, es por muchos melómanos conocida. Un paseo por Wikipedia nos vendría bien para conocer parte de ella: fue un cantante de rock, letrista, gaitero y batería que consiguió sus mayores éxitos siendo el vocalista de la citada banda AC/DC desde 1974 hasta su muerte ocurrida el 19 de febrero de 1980 como consecuencia de una intoxicación etílica.
Con una existencia llena de excesos desde su juventud, y tras pasar por distintos grupos musicales llegó al famoso grupo australiano de la mano de los hermanos escoceses Malcolm y Angus Young por el referido año 74, donde comenzó la época dorada de la banda.
Al frente de AC/DC Scott fue uno de los más carismáticos líderes musicales de los años 70 y 80. Su actitud descarada y bravucona en escena y su peculiar timbre de voz se combinaron para hacer que su imagen sea una de la más recordadas de la historia del rock.
Sus problemas con el alcohol, sin contar con su intensa relación con las drogas, finalmente serían la causa de su muerte cuando el grupo se encontraba en un momento de gran popularidad. Actualmente su tumba está incluida por la National Trust of Australia en la lista de clasificados como patrimonio de Australia.
Un proyecto muy interesante. La clásica historia que gusta en el cine de un mito de la música, sin duda toda una alegría para sus fans.
Fuente: TBDC
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