sábado, 13 de septiembre de 2008

Filme sobre espía en el IRA generó peligros reales, según su directora


Hacer una película sobre un infiltrado en el IRA en Belfast generó tensión e intrigas reales, según la directora de "50 Dead Men Walking", Kari Skogland, al estrenar su filme en el Festival de Cine de Toronto.

"Tenía muchas reuniones secretas en lugares oscuros. No hay duda que estábamos siendo observados por todas las partes. Los teléfonos estaban intervenidos, había cámaras y varias cosas", dijo el miércoles por la noche Skogland.

"Tuve reuniones con la RUC (Royal Ulster Constabulary, la policía norirlandesa), todas muy tranquilas, porque como me dijeron 'Estamos poniendo nuestras vidas en sus manos, porque si alguien sabe que estamos hablando con usted estaríamos en peligro'", indicó.

La cineasta también tuvo que ser "muy, muy transparente con la información" y con sus intenciones con la película, para no provocar la cólera de antiguos miembros del Ejército Republicano Irlandés (IRA), añadió.

El esperado filme se basa en la autobiografía de Martin McGartland como un matón de Belfast que fue reclutado por los servicios británicos en 1989 para espiar al IRA.

El británico Jim Sturgess -que actuó recientemente en "21" de Robert Luketic- encarna a McGartland, un joven a priori pacífico que colabora con los servicios británicos para espiar a sus pares, miembros del IRA, brazo armado del Sinn Fein.

Pero sus relaciones con Fergus, un agente británico encarnado por Ben Kingsley, son descubiertas. McGartland es torturado pero logra escapar. Desde entonces cambió de identidad bajo la protección británica, fue objeto de un atentado en Canadá en 1999 y vive con una identidad secreta.

McGartland, que asegura que la información que entregó a los británicos salvó al menos 50 vidas durante el conflicto que dejó miles de muertos en 35 años, debió dejar a su esposa e hijos para buscar refugio fuera del Ulster.

"Filmamos en áreas muy sensibles", contó Skogland. "Estábamos muy atentos a Jim porque estaba haciendo un personaje (real) que ellos (los locales) no quieren nada, queríamos asegurarnos que nunca corriera peligro".

"Ser un informante es un crimen atroz allí", explicó. "Conocían a Martin, conocían su historia, por lo que quería que supieran cómo la estábamos contando o habría puesto a nuestro elenco en peligro potencial".

Los ataques eran algo relativamente común durante las tres décadas de violencia entre protestantes y católicos en Irlanda del Norte, que finalizaron con los acuerdos de paz del Viernes Santo, el 10 de abril de 1998. Los 30 años de violencia entre protestantes y católicos dejaron 3.500 muertos entre 1969 y 1998.

El elenco llegó al lugar apenas un par de meses después que los antiguos enemigos enterraran sus diferencias y acordaran compartir el poder.

En un principio se iba a filmar en el norte de Inglaterra, pero las negociaciones de Skogland con ambas facciones durante dos años le permitieron rodar en Belfast.

Skogland permitió al elenco pasar meses con ex miembros del IRA para prepararse para sus paleles.

McGowen, que encarna a una implacable miembro del IRA, estimó que Belfast ha cambiado mucho. Pero que las heridas permanecen frescas.

Fuente: Yahoo

No hay comentarios:

Publicar un comentario